Compliance

El riesgo es un tipo de amenaza que, en caso de aparecer, provocará daños. Los daños pueden afectar en mayor o menor medida y de diversa forma, a personas, bienes, a la imagen, a la capacidad productiva de una compañía, etc.

Su aparición tiene siempre el mismo denominador común: causan daños que generan pérdidas. Los daños pueden minimizarse, normalmente gracias a medidas de seguridad, o pueden ser recuperados o resarcidos en parte gracias a los seguros, pero es incuestionable que, cuando se produce un daño, siempre se pierde algo.

En ocasiones ese algo puede ser de tal trascendencia que sea imposible recuperarse o resarcirse completamente de sus consecuencias.

Se considera riesgo a cualquier suceso capaz de poner en peligro a las personas, bienes y/o información. El riesgo puede derivar en la materialización del peligro que genera una incertidumbre, pérdida o daño.

Es por esto que donde exista riesgo de daño para las personas, bienes y/o información hay NECESIDAD de SEGURIDAD”.

Mejorar la seguridad es un objetivo estratégico compartido por todo el sector. Conscientes de esta realidad, deberemos abordar una gestión integral de la seguridad frente a:

1. La responsabilidad civil (modelo de prevención de accidentes)
2. La responsabilidad penal de la persona jurídica (modelo de prevención de delitos)

Ambos modelos de prevención (accidentes y de delitos) serán desarrollados a través de:

1. Plan de Prevención de la Responsabilidad Civil de los Riesgos Derivados de la Propia Actividad
2. Plan de Prevención de la Responsabilidad Penal de la Persona Jurídica